El clima en Nuevo León durante junio experimentó notables cambios en 2023 en comparación con el mismo mes en 2022, según los datos proporcionados por la Comisión Nacional del Agua (Conagua). Un fenómeno climático marcado por la escasez de lluvias y temperaturas extremas dejó su huella en la región.
Cae menos lluvia en Nuevo León
En junio de 2022, Nuevo León recibió 29.3 milímetros de lluvia, una cifra significativamente mayor que los escasos 15.3 milímetros registrados en el mismo mes de 2023. La disminución de las precipitaciones es evidente, mostrando una contracción de 14 milímetros en la cantidad de lluvia recibida durante esos 30 días.
Contrario a las expectativas de las autoridades estatales, no solo hubo una reducción en las lluvias de mayo a junio de 2023, pasando de 103.5 milímetros a 15.3, sino que también se observó una disminución de 22.2 milímetros entre el quinto y sexto mes del año.
Junio 2023: aumento en temperaturas
En términos de temperaturas, junio de 2023 presentó un aumento significativo en la máxima, alcanzando los 37.6 grados centígrados, en comparación con los 36.2 grados del mismo mes en 2022, representando un aumento de 1.4 grados. Además, el comparativo de mayo a junio de 2023 revela un aumento total de 6.9 grados centígrados.
El fenómeno meteorológico destacado de junio pasado fue la presencia de un anticiclón que generó temperaturas récord de entre 45 y 47 grados en Nuevo León y el noreste de México. Este patrón climático persistió durante la semana, llevando a condiciones calurosas y muy calurosas.
La predicción meteorológica señala que el jueves será el día más caluroso de la semana, con la posibilidad de alcanzar hasta 45 grados en la temperatura máxima. Aunque en las zonas montañosas se anticipa una temperatura mínima de 12 grados centígrados, en el resto del estado, incluida la zona metropolitana, no se esperan lluvias.
Este junio se destaca no solo por las temperaturas extremas sino también por la falta de lluvias, planteando desafíos para la gestión del agua y la adaptación a un clima en constante cambio en Nuevo León. La monitorización continua de estos patrones climáticos es esencial para comprender y abordar los impactos a largo plazo en la región.
¿Cómo prepararse para calores fuertes?
Ante las condiciones climáticas extremas, es imperativo adoptar precauciones exhaustivas para preservar la salud y el bienestar. En primer lugar, la hidratación constante se convierte en una prioridad; asegúrate de consumir una cantidad adecuada de agua a lo largo del día, evitando bebidas que puedan contribuir a la deshidratación, como aquellas con cafeína o alto contenido de azúcar.
En cuanto a la vestimenta, opta por prendas ligeras y de colores claros, que reflejen en lugar de absorber la luz solar. Buscar sombra durante las horas más intensas del calor también es crucial para evitar la exposición directa al sol.
La protección solar se convierte en un aliado esencial; utiliza protector solar para resguardar tu piel de los dañinos rayos UV. Además, ajusta tu rutina diaria para evitar actividades extenuantes durante las horas más calurosas del día.
Estar al tanto de las señales de agotamiento por calor, como mareos, fatiga extrema o náuseas, es fundamental. Si experimentas alguno de estos síntomas, busca un lugar fresco de inmediato y solicita ayuda médica si es necesario.
En resumen, adoptar un enfoque integral hacia la protección contra el calor no solo implica la ingesta adecuada de líquidos y la elección de la vestimenta adecuada, sino también la conciencia constante de tu entorno y la disposición a ajustar tu comportamiento para adaptarte a las condiciones climáticas cambiantes. Estas precauciones, cuando se aplican de manera consistente, son fundamentales para salvaguardar tu bienestar durante los periodos de calor extremo.