El Organismo de Cuenca Río Bravo de la Conagua, a través de su Director General, Luis Carlos Alatorre, revela un panorama desafiante para Nuevo León en los próximos meses. Según las proyecciones para marzo de 2024, se anticipa una disminución del 30% en las precipitaciones, representando un total de 16.0 mm, comparado con el promedio histórico de 23.00 mm.
Probabilidad de Lluvia Permanece por Debajo de Promedio
Avanzando a abril, aunque hay una mejora respecto a marzo, la probabilidad de lluvia permanece por debajo del promedio. Las estimaciones sugieren una acumulación de 32.2 mm, un 19% menos que la cifra histórica de 39.9 mm para ese mes.
En mayo, tradicionalmente un mes de mayores lluvias, se prevé una captación de 58.0 mm, un 10% por debajo del promedio de 64.3 mm. Estos datos revelan una tendencia preocupante de escasez hídrica para el estado.
Crisis Hídrica en Nuevo León
La crisis hídrica en Nuevo León es evidente, ya que la cantidad pronosticada de lluvia queda considerablemente por debajo de los registros históricos. No obstante, se destaca que, de mayo a septiembre, la región suele experimentar un aumento significativo en las precipitaciones, representando el 68% de la lluvia anual en México.
Luis Carlos Alatorre, en un llamado a la acción, insta a la ciudadanía a adoptar medidas de moderación en el suministro y consumo de agua en Nuevo León. A pesar de la disminución prevista en los próximos tres meses, la esperanza reside en la posibilidad de una temporada más lluviosa de mayo a septiembre, un período crítico para abastecer las reservas de agua en la entidad.
En conclusión, la gestión responsable del agua se presenta como una necesidad urgente en Nuevo León, y la conciencia ciudadana y las medidas de conservación jugarán un papel vital para enfrentar los desafíos de la escasez hídrica prevista en los próximos meses.